Este sábado, en el post "la anti-venta", un comentarista llamado Héctor, estudiante de Sociología, me hacía recordar el encuentro que la ISA ha organizado en Barcelona desde el viernes pasado hasta hoy lunes.
Autoridades como el francés Michel Maffesoli o el polaco Zygmunt Bauman figuraban en el cartel del evento, al que han acudido más de 3.000 profesionales de la sociología venidos de todo el mundo. A quien no le suenen estas personas, seguro que sí ha oído hablar de "tribu urbana" (término acuñado por Maffesoli) o de "modernidad líquida" (concepto creado por Bauman).
Un reportaje de El País subtitula hoy un reportaje de este congreso con la frase: "Un encuentro internacional reune en Barcelona a lo más granado de la sociología actual para debatir sobre las nuevas formas de pensar la realidad".
Me quedo con una de las sentencias de Maffesoli:
"En el futuro la idea de juventud no tendrá sentido, ya que todo el mundo intentará vestirse, pensar y actuar como un eterno joven". Añadió que no tiene sentido hablar de "los problemas de la juventud" porque este concepto equivale ya a hablar de los problemas de todos nosotros.
Otro punto destacado parece que fue la charla previa del profesor neoyorquino Craig Calhoun, que puso en duda ese modelo globalizado que defiende la desaparición de las identidades nacionales en aras de una supuesta identidad común. Por el contrario, Calhoun habló de ese grupo formado por personas que se expresan en inglés, viajan con frecuencia y tienen amistades en los lugares más insospechados del planeta ("como los asistentes a congresos internacionales"), incapaces, no obstante, de saber el nombre de su vecino de rellano. Una élite que vive la ficción de sentirse "ciudadanos del mundo" y cuya percepción de la realidad no suele ir más allá de los vestíbulos de los aeropuertos y de los hoteles de la cadena Hilton.
Y esto, añadió, no tiene color político ya que la izquierda "pija" ha olvidado ya la lucha social o incluso lo que sucede en su entorno inmediato en aras de este cosmopolitismo de lujo. "Los únicos ciudadanos del mundo que hay hoy en día son los refugiados que no encuentran país que les acoja y tienen que vivir con la carta de la ONU", concluyó.
Y así empezó el congreso...
Fuente: El País
2 comentarios:
Un espectro recorre el capitalismo: la juventud. La juventud que va a convertirse poco a poco en el signo de las clases pudientes. La juventud que aporta unos valores y una manera de entender el mundo que es más práctica para la sociedad que nos toca vivir. La juventud que sabe jugar y no quiere olvidarlo. La juventud como culto al cuerpo y el culto al cuerpo como última gran disciplina.La juventud alérgica al compromiso. La juventud y el carpe diem, el ser perfecto para que funcione una sociedad de turboconsumo de experiencias y emociones. La juventud que solo piensa en el presente...
Hola Miguel! Tu comentario me ha hecho ilusión primero porque ha permitido que este post no se quedara "virgen" de opiniones ajenas, pero sobretodo porque me ha permitido descubrir un blog que me ha gustado. Así que "coolhunter", muy interesante. Descubrí que existía esta profesión hace cosa de 2 años, y me fascinó la idea. Te doy la bienvenida al blog y espero y deseo "verte" más por aquí.
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